andando algunos pasos por esta casona de escritura nos acercamos a un recinto en el que se van escuchando distintas voces, como un gran murmullo
nos encontramos con que, en la narrativa, al leer palabras escritas escuchamos voces en nuestras cabezas,
casi como una alucinación, es otro de los poderes fascinantes de las palabras
cuando cobran vida historias y personajes, estos últimos hablan
las historias no se cuentan sólo a través de la narración, sino a través de las interacciones entre los personajes.
tomado de por ahí
A menudo, lo que hace que un diálogo sea bueno en la ficción es que sea creíble y realista. Los personajes deben hablar entre sí como lo hace la gente en el mundo real. Un diálogo realista y creíble fluye con naturalidad, sin llamar la atención, para sumergir al lector en el mundo de la historia.
Pero la diferencia entre el diálogo y la conversación del mundo real es que el diálogo debe servir a menudo a un propósito narrativo. Si un trozo de diálogo no hace avanzar la historia de algún modo, se considera mala escritura. En la vida real, sin embargo, a menudo hablamos entre nosotros sólo para llenar el silencio y pasar el tiempo, sin ningún gran propósito en mente (a menos que seas una mujer de negocios que intenta conseguir un trato comercial).
Sin embargo, no todos los escritores buscan el realismo en sus obras. Mientras que el realismo y la credibilidad pueden ayudar al significado general de algunos textos, otros escritores pueden querer hacer algo totalmente distinto con su diálogo para transmitir su significado único. Los escritores pueden adoptar a propósito diálogos poco realistas e incluso absurdos para adecuarlos a sus objetivos artísticos.
Diálogo - Puntos clave
- El diálogo es un intercambio hablado entre dos o más personajes en una obra escrita. En literatura, hay diálogo directo e indirecto.
- El diálogo se utiliza en la prosa, el teatro e incluso en la poesía. La narración se utiliza a menudo para complementar el diálogo y añadir información sobre lo que se dice.
- Las etiquetas de diálogo más comunes son las comillas, los saltos de línea, los verbos verbales y los adverbios. Los autores pueden prescindir de las etiquetas de diálogo para adaptarlas a sus propios objetivos artísticos.
- Algunos ejemplos de usos eficaces del diálogo en la literatura son El cuento de la criada (1985) de Margaret Atwood, el poema de Edgar Allen Poe "El cuervo" (1845) y la obra de Samuel Beckett Esperando a Godot (1953).
Rita me ve y mueve la cabeza –es difícil decir si a modo de saludo o como si simplemente tomara
conciencia de mi presencia—; se limpia las manos enharinadas en el delantal y revuelve el cajón en busca del
libro de los vales.
Frunce el ceño, arranca tres vales y me los extiende. Si sonriera, su rostro podría resultar amable. Pero su
expresión no va dirigida personalmente a mí: le desagrada el vestido rojo y lo que este representa. Cree que puedo
ser contagiosa, como una enfermedad o algún tipo de desgracia.
A veces escucho detrás de las puertas, algo que jamás habría hecho anteriormente. No escucho demasiado
tiempo porque no quiero que me pesquen. Sin embargo, una vez oí que Rita le decía a Cora que ella no se
rebajaría de ese modo.
Nadie te lo pide, respondió Cora. De cualquier manera, ¿qué harías, si pudieras?
Irme a las Colonias, afirmó Rita. Ellas tienen alternativa.
¿Con las No Mujeres, a morirte de hambre y sabrá Dios qué más?, preguntó Cora. Estas loca.
Estaban pelando guisantes; incluso a través de la puerta semicerrada podía oír el tintineo que producían los
guisantes al caer dentro del bol de metal. Oí que Rita gruñía o suspiraba, no sé si a modo de protesta o de
aprobación.
De todas maneras, ellos lo hacen por nosotras, o eso dicen, prosiguió Cora. Si yo no tuviera las trompas
ligadas, podría tocarme a mí, en el caso de que fuera diez años más joven. No es tan malo. No es lo que se llama
un trabajo duro.
Ella está mejor que yo, dijo Rita, y en ese momento abrí la puerta
los diálogos pueden cumplir varias funciones
como una de las maneras de hacer oír un mensaje como en los famosos diálogos socráticos
Los diálogos socráticos (en griego: Σωκρατικός λόγος o Σωκρατικός διάλογος) forman parte de un género en prosa literaria desarrollado en la Antigua Grecia a finales del siglo IV a. C.. Fueron preservados en los diálogos platónicos y la obra socrática de Jenofonte - tanto dramática como narrativa -, en los cuales los personajes discuten problemas morales y filosóficos para ilustrar el método socrático.
En sentido más estricto, el término se refiere a las obras en las cuales Sócrates es el personaje principal, aunque otros géneros son incluidos, como las Leyes de Platón e Hierón de Jenofonte, que son diálogos socráticos en los cuales un hombre sabio que no es otro que Sócrates, dirige la discusión
Un diálogo socrático puede pasar en cualquier momento entre dos personas cuando estas buscan la respuesta a una pregunta si esta la admite mediante su propio esfuerzo de reflexión y razonamiento. Se empieza haciendo todo tipo de preguntas hasta que los detalles del ejemplo son evidenciados para luego ser usados como plataforma para alcanzar valoraciones más generales.
La práctica implica efectuar una serie de preguntas alrededor de un tema o idea central, y responder las otras preguntas que aparezcan. Normalmente, este método se usa para defender un punto de vista en contra de otra posición. La mejor forma de evidenciar el acierto de un "punto de vista" es hacer que el oponente se contradiga a sí mismo y de alguna forma apruebe el "punto de vista" en cuestión.
La dialéctica —del griego διαλεκτική (dialektikḗ), τέχνη (tékhnē), literalmente: técnica de la conversación; con igual significado, en latín (ars) dialectica— es una rama de la filosofía cuyo ámbito y alcance han variado significativamente a lo largo de la historia.
también los diálogos son esenciales en muchos textos religiosos como en el ejemplo del La Bhagavad-gītā
(también, el Bhagavad Gita) es un importante texto sagrado hinduista.
Su contenido es la conversación entre Krishna ―a quien los hinduistas consideran una encarnación de Vishnú (mientras que los krishnaítas lo consideran el origen de Vishnú)―3 y su primo y amigo Arjuna en el campo de batalla en los instantes previos al inicio de la guerra de Kurukshetra. Respondiendo a la confusión y el dilema moral de Arjuna, Krishna explica a este sus deberes como guerrero y príncipe, haciéndolo con ejemplos y analogías de doctrinas yóguicas7 y vedánticas.
todo el texto consiste en una conversación
volviendo a la literatura, el autor a veces se toma de diálogos entre personajes de ficción para exponer su propia mirada del mundo, como por ejemplo en la novela de Oscar Wilde El retrato de Dorian Grey o Contrapunto de Aldous Huxley
y los temas son tan diversos como la vida: políticos, sentimentales, religiosos, existenciales etc.
uno puede contar mendiante un diálogo entre personajes cómo se hace una comida o la hisotiria de una casa o una calle
también se puede jugar con los diálogos absurdos que producen un efecto de humor o de rareza y extrañamiento en el lector
un fragmento del teatro del absurdo de E. Ionesco
Berenguer (a Juan): Vivir es una cosa anormal.
Juan: Al contrario. Nada más natural. La prueba: todo el mundo vive.
Berenguer: Los muertos son más numerosos que los vivos. Su número aumenta. Los vivos
son raros.
Juan: Los muertos no existen, ¡es preciso decirlo!... ¡Ja! ¡Ja!... (Gran risa). ¿Ellos también
te pesan? ¿Cómo pueden pesar las cosas que no existen?
Berenguer: ¡Yo mismo me pregunto si existo!
Juan (a Berenguer): Tú no existes, mi querido, porque no piensas. Piensa y existirás.
El lógico (al Señor anciano): Otro silogismo: todos los gatos son mortales. Sócrates es
mortal. Por lo tanto Sócrates es un gato.
El señor anciano: Tiene cuatro patas. Es cierto, tengo un gato que se llama Sócrates.
El lógico: Usted ve...
Juan (a Berenguer): Eres un farsante en el fondo. Un mentiroso. Dices que la vida no te
interesa. Sin embargo alguien te interesa.
Berenguer: ¿Quién?
Juan: Esa compañerita de oficina que acaba de pasar. ¡Estás enamorado!
El señor anciano (al Lógico): ¡Entonces Sócrates era un gato!
El lógico (al Señor anciano): La lógica nos lo acaba de revelar.
de todos modos ya pasaremos a la sala del teatro donde el diálogo y el monólogo ocupan otro lugar
con nuestras manos tejiendo palabras podemos hacer dialogar a las cosas podemos darle vida y voz a animales, a objetos
una bicicleta puede dialogar con un perro
una flor puede dialogar con una computadora
un fantasma y un cajero de banco
y así
podemos jugar a inventar imaginar re crear diversidad de diálogos
y experimentar cómo las voces cobran casi vida propia en nuestra escritura siempre en el asombro del proceso de creación cuando nos lo permitimos con total libertad
// TERMINAMOS CON UN BREVE CUENTO DE BORGES
Diálogo sobre un diálogo
[Minicuento - Texto completo.]
Jorge Luis BorgesA- Distraídos en razonar la inmortalidad, habíamos dejado que anocheciera sin encender la lámpara. No nos veíamos las caras. Con una indiferencia y una dulzura más convincentes que el fervor, la voz de Macedonio Fernández repetía que el alma es inmortal. Me aseguraba que la muerte del cuerpo es del todo insignificante y que morirse tiene que ser el hecho más nulo que puede sucederle a un hombre. Yo jugaba con la navaja de Macedonio; la abría y la cerraba. Un acordeón vecino despachaba infinitamente la Cumparsita, esa pamplina consternada que les gusta a muchas personas, porque les mintieron que es vieja… Yo le propuse a Macedonio que nos suicidáramos, para discutir sin estorbo.
Z (burlón)- Pero sospecho que al final no se resolvieron
A (ya en plena mística)- Francamente no recuerdo si esa noche nos suicidamos.
FIN
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